«QUE LA GUERRA NO ME SEA INDIFERENTE»

Miles de personas se reunieron en la noche de ayer, domingo 1 de abril, junto al Monumento a los Caídos  en Malvinas para  recordar junto a León Gieco a los soldados que dieron su vida en la guerra del Atlántico Sur treinta años atrás. En una vigilia llevada a cabo a nivel nacional en la cual Puerto Madryn se  sumó con las voces de su pueblo, junto a un grande entre los grandes como lo es Gieco.

Puntualmente como se había programado, a las 21:30 horas se dió inicio al espectáculo conducido por Janet Monsalve y Elvio Fragosa, quienes motivaron a levantar muy altas  todas las banderas de agrupaciones presentes en esa noche especial.

Los primeros en subir al escenario fueron cuatro jóvenes locales dedicados al arte callejero del Hip Hop interpretando temas de su autoría pensados para la fecha como: “Para los que no están”, remarcando que ellos tienen la misma edad que tenían aquellos soldados que fueron a pelear. “Crazy”, de la ciudad vecina de Rawson continuó con el Hip Hop. Y luego se dio lugar a artistas consagrados  del folclore local como lo son Ramiro Blacut y Esteban Fernandez junto a Sandra Galarza como artista invitada.

Pasadas las 22 horas, el más esperado de la noche se presentó solo, vestido de negro con su guitarra pintada y su armónica al cuello. Los tres primeros temas que interpretó fueron dedicados a las mujeres para recordar el pasado 8 de marzo y para ir agendando el futuro 24 de noviembre, Día Mundial de la No Violencia de Género. Las melodías fueron acompañadas por videos en los que se sucedían los rostros de grandes mujeres de la historia mundial. La más aplaudida, Mercedes Sosa. Siguieron en el espectáculo las canciones del comienzo de la carrera de León, pero ya acompañado de sus músicos, no faltaron  “La Rata Lali”, “El país de la libertad” y clásicos de los 70′ que la gente coreó al unísono. Las canciones de  “Ushuaia a la Quiaca” (disco histórico del artista que compuso y grabó junto a Gustavo Santaolalla y alumnos y maestras de todo el país) fueron las más cantadas y bailadas por todos. Jóvenes, adultos, niños; el público de todas las edades hizo frente al frío de la noche y se dejó emocionar con la música y los videos de las pantallas gigantes  que constantemente acompañaban las canciones.

La libertad  como estandarte de la noche, la ganas de cantar, de saltar, de compartir y acompañar a todos y sobre todo a los veteranos de Malvinas allí presentes. Unidos por la música y las letras de estas que precisamente plasman nuestra historia en cada estrofa.

“Sólo le pido a Dios que la guerra no me sea indiferente”: no hace falta decir mucho más con esa canción entonada por todos junto a León Gieco y a los veteranos en el escenario. “Solo le pido a Dios que el futuro no me sea indiferente;  es mi pequeña cuota por la paz, la libertad y la justicia”, concluyó el artista  encapuchado para soportar el frío,  y fue dando paso al  fin de  una noche por demás especial y conmovedora.

La vigilia concluyó con el izamiento del pabellón y la entonación del Himno Nacional Argentino con la presencia del señor Gobernador Martín Buzi y el Intendente Ricardo Sastre.

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